Tostadores Reunidos está comprometido con los proyectos sociales, tanto a nivel nacional como internacional. De esta forma, el grupo paga un céntimo más por cada kilo de café que comercializa, para financiar, cada año, iniciativas sociales por valor de 60.000 euros que realiza con diferentes organizaciones. El compromiso de hacer un “Café Socialmente Responsable”, nos ha llevado, junto al resto de socios de Tostadores Reunidos, a desarrollar diversos proyectos de cooperación en distintas áreas rurales cafetaleras de Honduras y El Salvador, así como a desarrollar intervenciones de formación e integración con personas inmigrantes y autóctonas en riesgo de exclusión social en España.

Desde el año 2004 Tostadores Reunidos ha confiado gran parte de su acción social en CESAL, una ONG de Cooperación Internacional y Acción Social que desarrolla su trabajo en 15 países desde 1988. El esfuerzo del Grupo ha permitido beneficiar a más de 10.000 personas en todos estos años en países como Honduras, El Salvador, Perú, Ecuador y España con la ejecución de 12 proyectos.

Actualmente Tostadores Reunidos está apoyando a CESAL en Ecuador a través de un proyecto para la mejora de la producción y comercialización de sombreros de paja toquilla, con el fin de reactivar la economía de las familias, cuya situación se vio afectada tras el terremoto que se produjo el 16 de abril de 2016 en Portoviejo. Se está trabajando para lograr favorecer la inclusión económica de las mujeres productoras de la asociación de producción artesanal de sombreros El Milagro de Picoazá. Con el trabajo llevado a cabo se quiere:

Mejorar los ingresos de 40 mujeres, beneficiarias del proyecto, a través de la dotación de las herramientas necesarias para que la asociación de producción artesanal de sombreros del Milagro de Picoazá pueda comercializar sus productos a precio justo y en condiciones favorables.

En el año 2023, CESAL arrancó con el proyecto “Mejora de los sistemas agroalimentarios sostenibles que refuerce la trazabilidad y promueva en mercados diferenciados al café bajo en carbono de 15 PYME del Occidente de Honduras”, auspiciado por la Unión Europea en el marco del programa AL-INVEST Verde. En ese contexto y de forma complementaria se sumó la iniciativa de CESAL / Tostadores Reunidos con este proyecto, a fin de responder de mejor manera a una necesidad de los productores con el fin de asegurar un mayor impacto a través del esfuerzo conjunto.

Informe Final de Cesal para Tostadores 2023

El proyecto trabajó con jóvenes egresados de proyectos anteriores financiados por Tostadores Reunidos S.A., en los años 2020 y2021; jóvenes hijos e hijas de productores o jóvenes productores que han participado en procesos de formación básica en Habilidades para la Vida, técnicas en café, además de la especialización en la calidad de café.

Informe Tostadores 2022

La tercera fase ha centrado su objetivo en mejorar la calidad de El proyecto se planteó para un grupo meta integrado porjóvenes hijos e hijas de productores y jóvenes productores. Se buscó a través del proyecto el impulso de estrategias para la resiliencia climática y económica relacionadas a la producción y productividad del café, y a que en la zona del occidente de Honduras el café es una importante fuente de generación de ingresos económicos y por ello de sostenimiento de la economía local y familiar.

Informe Final de CESAL para Tostadores 2021.

La migración es un fenómeno multifactorial en Honduras, que durante los últimos años ha mantenido una tendencia creciente. Este éxodo de población hondureña responde a la falta de oportunidades, un mercado laboral con altas tasas de desempleo y subempleo, así como altos niveles de inseguridad ciudadana, violencia y la necesidad de reunificación familiar.
Los bajos precios del café, el aumento del desempleo y la pobreza; son algunos de los precursores de la migración en las zonas rurales del país.

INFORME FINAL TOSTADORES HN 2020

La tercera fase ha centrado su objetivo en mejorar la calidad de café producido por la COCREBISTOL, a través de la implementación de un laboratorio de cata. Este se ha dotado de una tostadora de café; un molinillo de Café Profesional Mahlkonig; un medidor de humedad (tester); balanza; selección y clasificación de muestras de grano (zarandas); Tetera de vertido de agua manual; caja de aromas (Le Nez du café ) y termómetro. Además, se han mejorado las capacidades de 78 productores para la exportación del café, lo que ha permitido a COCREBISTOL convertirse en exportador directo, consiguiendo así mayores beneficios para los productores. Actualmente exportan a medio oriente y Bélgica (MIKO CAFÉ y Puro Café de Inglaterra).

La segunda fase del proyecto se ha centrado en los 44 socios de la cooperativa COCREBISTOL, con el objetivo de mejorar de la calidad de café certificado orgánico, capacitación y asistencia técnica y entrar en tramites de licencia de exportación. En esta fase se ha instalado un módulo de despulpado único para el café certificado con sifón, elevador, separadores verdes, pulperos y criba para este café especial. El nuevo módulo, para el uso exclusivo del beneficiado húmedo de cafés de los socios certificados con sello orgánico, una capacidad de despulpado de 120 qq uva/hora. Además de los 44 socios de la cooperativa, el proyecto beneficia de forma directa a sus familias (220 personas) que verán mejorados sus ingresos.

La intervención  ha contribuido a mejorar los procesos de beneficiado de café, fortaleciendo las capacidades y los conocimientos técnicos de 360 personas. El proyecto favoreció, asimismo la introducción de nuevas tecnologías productivas. Se construyeron 16 secadoras solares con una capacidad de secado de 447qq cada 5 días y la formación en capacidades técnicas. El proyecto atendió a 2 cooperativas, COCREBISTOL (Cooperativa Cafetalera Rerservas Biológicas Santa Teresa Ocotepeque) y COPRAL (Cooperativa de Productores Agrícolas La Labor Ltda) además de otros productores individuales.

Con el proyecto “Juntos podemos mejorar la educación”, hemos contribuido a la educación de 839 niños y niñas indígenas, y a su vez propiciar el desarrollo a través de la interacción profesorado – padres y madres. Además, con la intervención, hemos promovido acciones productivas como crianza de peces, aves y cerdos, para mejorar la nutrición de los niños y niñas.

Las familias de la región se encuentran dentro del grupo de más alto riesgo por desnutrición y condiciones precarias de salud. El proyecto puesto en marcha ha contribuido contribuyó a la creación de huertos sostenibles para mejorar la alimentación de 1.175 familias.

Se han desarrollado 26 cursos de formación y orientación al empleo (informática, hostelería, estética, alfabetización) que han beneficiado a más de 400 jóvenes; creado 1 espacio de apoyo escolar al que han acudido 24 niños de entre 6 y 12 años; y se han realizado 10 actividades culturales dirigidas a facilitar la integración de 500 personas.

773 mujeres realizaron 11 cursos de formación de corte y confección, informática, teleoperadoras, diseño gráfico… orientándoles laboralmente a lo largo de 15 meses..

Se consiguió dar apoyo a 19 cajas rurales a través de un crédito gestionado por la Unión Nacional de Campesinos (UNC). El crédito se completó con la capacitación en la gestión y el apoyo en la comercialización de la producción. En total se beneficiaron directamente 525 personas de 19 comunidades de los departamentos de Copán, Santa Bárbara, Ocotepeque y Lempira.

Con este proyecto se consiguió la implementación de 7 sistemas de riego (abarcando una superficie de 9,06 hectáreas), además de la formación sobre extensión agrícola beneficiando a 200 productores de los municipios de Tomalá, Terlaca, Guarita, San Juan Guarita y Valladolid, en el departamento de Lempira, en Honduras.

Gracias a este proyecto se construyeron tres plantas procesadoras para la elaboración del café, beneficiando así a 320 productores de los municipios de Tambla Y Tomalá, departamento de Lempira, zona rural de Honduras. Además se consiguió formar a más de 200 productores de café en el manejo integrado de los recursos del suelo y de plagas, y se crearon viveros para la producción orgánica.

Centro Educativo Jesús Obrero que atiende a más de 600 jóvenes y que está situado en una zona rural de El Salvador llamada Microrregión El Bálsamo. También se formaron a 120 jóvenes que provenían de áreas rurales cafetaleras en mantenimiento y reparación de ordenadores y redes. Además, se les pudo dar un acompañamiento educativo a través de actividades deportivas y la organización de campamentos.